×




INGREDIENTES

- 200 ml Leche
- 250 ml Mascarpone (o queso de untar)
- 200 ml Nata liquida
- 100 g Azúcar
- 8 Láminas de gelatina
- 1 Bote fresas en almíbar (peso neto 420 g)
- 1 sobre gelatina neutra (12 g)
- ½ Vaso de agua
- Fresas, moras, grosellas, etc. para decorar



PREPARACIÓN

• Empezamos nuestra receta poniendo en un bol un poco de agua fría, y las 8 láminas de gelatina, para que se vayan hidratando. Seguidamente ponemos en un cazo los 200 ml de leche y lo llevamos al fuego. Una vez que empiece a hervir, añadimos los 250 g de queso mascarpone o queso de untar, con ayuda de unas varillas o un tenedor, le vamos dando vueltas hasta que se deshaga.
• Una vez disuelto el queso en la leche, añadimos los 200 ml de nata, cuando veamos que va a empezar a hervir, añadimos los 100 g de azúcar, mezclamos bien para que se disuelva, añadiendo a continuación las 8 láminas de gelatina, bien escurridas del agua donde las tenemos hidratándose. Retiramos del fuego y con ayuda de un tenedor o varillas mezclamos bien todos los ingredientes.
• Seguidamente forramos la base del molde (mejor desmontable) donde vayamos a poner nuestra tarta, con papel de hornear, para que nos sea más fácil desmoldarla, cuando la tengamos lista. A continuación vertemos en el molde la mezcla que hemos preparado anteriormente, dejándola enfriar hasta que la gelatina haga su función y se cuaje un poco. Para acelerar este proceso la podemos meter en el frigorífico.
• Una vez se haya cuajado un poco vamos a preparar la cobertura de nuestra tarta, para ello ponemos el sobre de gelatina neutra, en medio vaso de agua para que se vaya hidratando. Seguidamente abrimos el bote de fresas en almíbar y lo ponemos en un cazo, con el caldo o almíbar que traen, llevamos al fuego y según se va calentando, con ayuda de un tenedor vamos aplastando las fresas.
• Cuando veamos que está caliente, trituramos con ayuda de una batidora. Una vez trituradas las fresas volvemos a llevar al fuego y cuando veamos que va a romper a hervir, añadimos la gelatina neutra que tenemos en el medio vaso de agua. Mezclamos bien con ayuda de un tenedor o varillas, y retiramos del fuego dejando templar un poquito.
• A continuación vertemos la cobertura de fresas por encima de nuestra tarta de queso que ya estará fría y cuajada, ayudándonos del reverso de una cuchara para que esta no caiga de golpe. En esta operación tenemos que tener cuidado para que no se mezcle la cobertura de fresa, con la mezcla de queso.
• Seguidamente metemos en el frigorífico, por lo menos 3 o 4 horas hasta que todos los ingredientes estén bien cuajados. Con esto solo nos queda sacar del frigorífico, desmoldar con cuidado y decorar como más nos guste, pudiendo utilizar unas fresas, grosellas, moras, etc.

Recetas relacionadas:







Deja tu comentario sobre la receta: